domingo, 20 de agosto de 2017

Una nueva esperanza

Me va a permitir George Lucas que le tome prestado el título que adoptó la primera película de La Guerra de las Galaxias porque creo que difícilmente se podría definir mejor la sensación general tras lo vivido este pasado sábado en el Cartagonova. Y es que existieron numerosos elementos positivos de análisis, desde el vertical juego a que contamos con un delantero que marca goles, que le animan a uno a ser optimista de cara a la presente campaña. También hubo algún pero, cómo no, aunque no con la suficiente fuerza para que los que le tenían la guillotina preparada a Monteagudo tras el 2-2 se atrevan a levantar la voz con energía. Y añado, estoy completamente convencido de que esos mismos que hubiesen cargado contra el entrenador en caso de no acabar ganándose el partido, en el descanso del mismo, cuando se aventuraba una plácida segunda parte, ni se acordaron de él. Lo habitual. No obstante, pese a la ilusión generada después de esta primera jornada de liga, no hay que olvidar precisamente eso, que es la primera jornada de liga. Y esto es muy largo. De hecho, muchos han sido los comienzos en 2ªB con victoria de este Cartagena en casa, pero solo en una de las ocasiones se degustó la ansiada guinda a final de temporada.

Episodio IV de Star Wars
Centrándonos siempre en la categoría de bronce, en el debut oficial del Club, el entonces Cartago vencía 2-1 en la Jornada 1 de la temporada 1998/99 al Espanyol 'B' con goles de Manolo y Alberto García. En 36 de las jornadas se estuvo en puestos de play-off aquel año, incluso luchando por el liderato a falta de tres semanas, que culminaría con el siniestro epíligo del 'cordobazo'. La siguiente vez en la que se empezó la competición ganando en casa fue en la 2002/03, la de Luis Oliver al mando. Se confeccionaba una potente plantilla, que acabaría mermada en su rendimiento con la espantada del empresario navarro, pero que en el choque inicial superaba por 3-1 al Mérida. El equipo llegaría a ser el primer clasificado en la Jornada 3, con pleno de victorias, pero acabó vagando por mitad de la tabla e incluso viendo con preocupación los puestos de descenso. Un año después, ya con el aterrizaje de Paco Gómez en la ciudad y el cambio de nombre de la entidad, se volvía a ganar en la Jornada 1 en el recinto de Benipila. En esta ocasión al Palamós, por 2-0, y aquel quinto puesto del partido inaugural sería la posición más alta que se disfrutaría aquella temporada. Machuca acabó dimitiendo en febrero, estando a cuatro puntos del play-out, y tendría que ser Pep Balaguer el técnico que finalmente consiguiese la salvación sobre la bocina.

Avanzando hasta la 2005/06, con Juan Ignacio en el banquillo, nuevamente se comenzaba


domingo, 13 de agosto de 2017

Veinte años de la primera Carabela

No, no me he vuelto loco al titular este nuevo artículo. Sé de sobra que la primera edición del trofeo Ciudad de Cartagena, posteriormente apellidado Carabela de Plata, tuvo lugar en 1969 en forma de cuadrangular y enfrentó al anfitrión albinegro, entonces denominado CD Cartagena, con el CD La Unión, Sestao SC y los marroquíes del SU Sidi Kacem; y que la copa vencedora la acabaría levantando el local Santos tras imponernos en la final al conjunto vasco por 2-0, con goles de Escolá y Unamuno.

Al titular “Veinte años de la primera Carabela” me refiero a que en este mes de agosto se han cumplido dos décadas desde la primera vez que el FC Cartagena, entonces Cartagonova FC, la disputase. Ya que, pese a que su fundación se había producido hacía dos veranos, la entidad comandada por Florentino Manzano no fue invitada para las ediciones anteriores, de 1995 y 1996, en las que el histórico efesé, ambas temporadas en Tercera División, continuaba asumiendo el rol de primer equipo de la ciudad. En la primera de las susodichas, la de 1995, el torneo disfrutaba de un derbi en su cartel frente al Real Murcia, que también militaba en Tercera. Poco más de 200 espectadores presenciaron la cita y el Cartagena vencería por 1-0 a unos pimentoneros plagados de jugadores conocidos por aquí, tales como Palomeque, Ruiz López, Ginés Requena, Ayala, David Díaz o Rai. Curiosamente, un día antes de la citada edición XXV del Carabela, se efectuaba la presentación oficial del Cartago en Los Juncos, en un triangular junto al AD Relesa La Palas, el Olaria AC brasileño y más de 300 personas.


Un año después, en agosto de 1996, la celebración del trofeo supondría toda una premonición. El efesé, en Tercera y con muchísimos jugadores jóvenes y de cantera, caía estrepitosamente por 0-5 ante el AD Mar Menor, que iba competir por primera vez en su historia en 2ªB y el cual disputaba el torneo completamente gratis para así cooperar con


martes, 1 de agosto de 2017

Un lustro sin fútbol profesional

Hace tiempo escribí unas líneas en las que intentaba evidenciar la carencia de memoria en la que suele vivir la actualidad del fútbol y, en las que vienen a continuación, me apetece comentar algo que de cierta manera está directamente relacionado con aquella idea: la rapidez con la que pasa el tiempo en este deporte. Y pondré un ejemplo fácil para visualizarlo mejor. A primeros de julio se cumplían dos años de la presentación de Víctor Fernández como nuevo entrenador del Cartagena y, junto a él, también sostenía la camiseta albinegra un sonriente Deseado Flores. Han pasado tan solo dos años y dicha estampa ya la vemos más desfasada que un futbolista calzando botas negras.

Es que estaba el otro día ordenando fotos y anotaciones varias, en mi base de datos particular, cuando volví a caer en la cuenta de que ha transcurrido todo un lustro desde que sufriésemos el último descenso de Segunda División. Fue en el Nuevo Colombino de Huelva, el 2 de junio de 2012 y curiosamente frente al mismo rival con el que abrimos esta temporada 2017/18, donde el Cartagena decía adiós a la LFP ganando por 1-2. Una despedida con victoria estéril, puesto que el triste desenlace se había consumado dos semanas antes en Córdoba.

Ángel Quirantes
Mucho podríamos hablar y analizar de aquella penosa campaña, empezando por los antecedentes con el cese de David Buitrago a mitad de la temporada anterior por motivos familiares, en versión oficial. Aunque cabría preguntarse si no fue, más bien, por la comisión que debía cobrar el caravaqueño por el traspaso del guardameta Rubén al Málaga. El caso es que tras su salida Paco Gómez manifestaba que él mismo haría las veces de nuevo director deportivo y hasta el propio Juan Ignacio tuvo que calmar los ánimos generales reflexionando en voz alta que el club debía incorporar a una persona específica para encargarse de dicha parcela.

No le faltaba razón al hoy entrenador Shanghai Shenxin, lo de Paco Gómez era una bravuconada, pero fue peor el remedio que la enfermedad. El dedo divino escogería a Ángel Quirantes, cuya era comenzaba en abril y finalizaba en septiembre de 2011, y pese a su trayectoria, casi tan efímera como la de Javi Mérida este verano, le cundió el