jueves, 29 de diciembre de 2016

I Trofeo de La Amistad

El pasado 6 de diciembre se cumplieron veintiún años de la celebración de un pintoresco torneo triangular que tuvo lugar en el Estadio Cartagonova. Aquel Día de la Constitución, de 1995, se enfrentaron entre sí Cartagena FC, Real Murcia CF y Cartagonova FC, resultando ganador este último, en el que se denominó 'I Trofeo de La Amistad'.

Antes que nada, para una correcta comprensión de la trascendencia de dicho evento, hay que ponerse en situación. Era la temporada 1995/96 y los dos equipos más importantes de la Región, Cartagena y Real Murcia, habían descendido a Tercera División, el primero administrativamente y el segundo de forma deportiva. La representación del fútbol autonómico en 2ªB recaía en Yeclano CF y Lorca CF, exclusivamente. Por entonces, el Cartagonova, nacido el 27 de julio de ese mismo año y que disputaba sus partidos como local en el demolido campo de Los Juncos, competía en Territorial Preferente con el objetivo de subir a Tercera. Sin olvidar que a medio plazo la intención del club no era otra que la de recoger el testigo que el efesé, de manera aparentemente irremediable, iba a ceder debido a su deuda.


Para entender mejor la intrahistoria de este 'I Trofeo de La Amistad' también es necesario perfilar en profundidad la figura de Florentino Manzano. Exdirectivo del Cartagena FC y fundador del Cartagonova FC, ocupaba en aquellos tiempos el puesto de vicepresidente de la Federación de Fútbol de la Región de Murcia. Desde su posición y por encargo de


jueves, 22 de diciembre de 2016

El prestigio del Colombino

El calendario ha querido que el último equipo al que los albinegros hayan visitado en esta primera vuelta sea el Recreativo de Huelva, en su estadio, el Nuevo Colombino. Un estadio de reciente recuerdo para los cartageneros, que se enfrentaron a los onubenses en varias ocasiones en la liga de plata del fútbol español. Curiosamente fue en Huelva donde el Efesé dijo adiós a sus opciones de ascenso en la temporada más gloriosa de la historia del club, en la que un gol de Braulio Nóbrega (que dos años después vestiría la zamarra blanca y negra) doblegaba al Cartagena en la jornada 41, dejándolo matemáticamente sin opciones de tocar el cielo. Y eso fue lo que duró aquel sueño, 41 intensas jornadas, en las que soñamos con cambiar el sino de un fútbol cartagenero desafortunado desde sus inicios, que nunca ha probado el caviar futbolístico de la liga de las estrellas y que nunca estuvo tan cerca de probarlo como en aquel año 2010. Nada más lejos de la realidad, el Cartagena se quedó sin opciones en Huelva, pero lo fue fraguando en días tan fatídicos como recordados, caso del Levante y el Hércules


Mariano ante el Recreativo en Huelva
El fútbol, tan lleno de casualidades, hace que los románticos del balompié relacionemos fechas, partidos, estadios o resultados, adaptándolos de tal manera a nuestra forma de ver rodar el balón, que nos hace imposible evitar que afloren los sentimientos ya vividos. El Cartagena, dijo adiós a la categoría de plata también en el Nuevo Colombino, aunque como en la anterior ocasión, ya había firmado su sentencia jornadas atrás en Córdoba. Aquella vez se ganó la intrascendente última jornada (y la penúltima, también sin opciones). De manera que cada vez que los albinegros pisan el feudo del Decano no podemos evitar recordar tiempos anteriores. 

Al Efesé le faltaba quitarse esa espina, ganar en Huelva al Recre, que aunque sea en los peores momentos de su historia no es tarea fácil. El pasado curso estuvo a punto de hacerlo con el gol de Fede Laens, pero este Cartagena no es el de antes. Es un equipo


viernes, 25 de noviembre de 2016

Abel, Torrecilla y Amaral

Hace diez años del inopinado episodio que vamos a recordar hoy. Para ello debemos situarnos en la campaña 2006/07, es decir, la siguiente al 'vecindariazo'. Eran los últimos días de diciembre de dicha temporada, con el calendario inmerso en el parón liguero de Navidad y a escasas horas de la apertura del mercado invernal de fichajes. En lo deportivo, el Cartagena ocupaba una notable cuarta posición a solo tres puntos del primer clasificado, el Sevilla Atlético. Habiendo, además, desplegado un gran potencial ofensivo a lo largo de las diecisiete jornadas disputadas, con más de dos goles por partido como media.

Abel en su presentación
En la plantilla albinegra se encontraba Roberto Rodríguez, un central que había jugado en Segunda División con el filial del Atlético de Madrid y que también había militado varias temporadas en 2ªB. Un defensa que gozaba de cierto nombre en la categoría pero que como cartagenerista no estaba siendo titular. Tenía por delante a Orlando y Lusarreta, aunque sí que disfrutaba de minutos con cierta asiduidad. Hasta aquí, todo normal. Fue en los primeros días del citado mes de diciembre cuando se produjo el gran desencadenante de los acontecimientos. Roberto se lesionaba, era sometido a una complicada intervención quirúrgica y quedaba apartado varios meses de los terrenos de juego. Lógicamente, el Club debía buscarle un recambio y es en dicho momento cuando hace aparición el nombre de Abel en la escena.

Abel Valenzuela era un joven malacitano que a sus 25 años sabía lo que era ascender a Segunda División, por dos veces. Concretamente, en las filas del Málaga B y del Salamanca, entidad esta última a la que pertenecía por estas fechas a las que nos


viernes, 18 de noviembre de 2016

Viento en popa, a toda vela

“Con diez cañones por banda, viento en popa a toda vela, no corta el mar sino vuela, un velero bergantín” son los versos que inician uno de los textos más célebres de la literatura española, la Canción del Pirata escrita por José de Espronceda. A la localidad natal del autor, Almendralejo, rendirá visita este fin de semana el Cartagena, flamante nuevo líder del Grupo IV, con el ánimo de afianzar su posición recién estrenada.

Hace unos días, justo antes del partido frente al Sanluqueño, expresaba en estas líneas que no concebía que el conjunto albinegro no fuese a estar hasta final de temporada peleando por ser campeón de grupo, viendo el nivel de los rivales y el potencial cartagenero, y parece que lo hubiera comentado de forma premonitoria. A la más que previsible victoria de los de Monteagudo, ante el colista, le acompañó la fortuna y un decadente Marbella no lograba pasar del empate en casa. La consecuencia de ambos resultados: el Cartagena volvía a ocupar la primera plaza de la competición liguera, tres años después de la última vez que lo hiciese. Desde la Jornada 14, casualmente la misma que ahora, pero en la temporada 2013/14 y con Tevenet en el banquillo. ¡Albricias! Dicho liderato de hace tres años, para nuestra desgracia, fue efímero. Perduró esa única semana y, además, estaba compartido en puntuación con el Albacete. Los dos conjuntos teníamos 30 puntos, aunque nosotros contábamos con mejor golaverage general. El domingo siguiente se perdía en Cáceres (para los frikis de los paralelismos, es una provincia de Extremadura) y nunca más supimos del primer puesto, hasta hoy.

Jack Sparrow a bordo de La Perla Negra
Volviendo a la actualidad, está más que bien haber recuperado la sensación de lo que es ser líder. El sentirse importante y, sin olvidar la humildad, dar un aviso para navegantes. Que para eso somos el Cartagena y esto es la 2ªB. Eso sí, sin obsesionarse. Ojalá no


domingo, 13 de noviembre de 2016

El maravilloso Grupo IV

Nací mediada la década de los 80s, más o menos cuando el primer videojuego de la saga Mario Bros salía a la venta. Por mera concatenación temporal, comencé a tener consciencia de lo que ocurría a mi alrededor y a formarme como persona, lo que sexualmente equivaldría a mi etapa púber, a finales de los años 90s. En aquellos días quien escribe no era más que un simple mozalbete seguidor del entonces denominado Cartagonova FC, un club todavía más novicio que servidor. Dicho club ascendía a 2ªB en junio de 1998 y una vez alcanzó la citada meta, al igual que le ocurriera en sus play-offs de ascenso a la división de bronce, la RFEF lo ubicaba por distribución geográfica junto a los equipos valencianos, catalanes y baleares. Es decir, en el Grupo III.

Temporada 1998/99
La lista de rivales en aquella primera temporada del Club en la categoría habla por sí sola: Levante, Elche, Murcia, Terrasa, Sabadell, Figueres, Castellón o Nàstic, entre otros. Conjuntos históricos, con amplia experiencia en divisiones superiores y, en algún caso particular, incluso con presencia relativamente importante en Primera División. Aquella campaña 1998/99 subieron dos equipos del grupo a Segunda (Levante y Elche) pero también bajaron tres a él (Mallorca B, Barcelona B y Hércules), por lo que para el siguiente año se mantenía la dureza competitiva. Circunstancia que se repetiría, además y de forma similar, una tercera vez. Así que, en otras palabras, puedo decir que tuve la suerte de crecer viendo a los albinegros enfrentarse a adversarios jamón de Jabugo.

Ya en la última época de Florentino Manzano, y en la única temporada de Luis Oliver, la Federación Española tuvo a bien encuadrarnos junto a andaluces, extremeños y norteafricanos. Hablamos de comienzos del Siglo XXI, emergiendo a nivel nacional el


lunes, 7 de noviembre de 2016

El casi Eto'o del Cartagonova

El calendario marcaba los últimos de días de noviembre en el año 1999. Tan solo cinco meses después de la fatídica tarde del 'cordobazo', para ubicarnos. El por entonces denominado Cartagonova FC, con Florentino Manzano de presidente y Txutxi Aranguren como entrenador, participaba por segunda temporada consecutiva en 2ªB. Concretamente, en el potente Grupo III de la zona levantina junto a los Murcia, Hércules, Castellón, Nàstic o Sabadell. Los albinegros, graduados como el equipo revelación la campaña anterior y habiendo rozado el ascenso a Segunda División, mantuvieron gran parte de la plantilla que tan cerca estuvo de lograr la primera gran gesta en la corta historia del Club.

Jugadores que los aficionados de aquella época bien pueden enumerar de memoria, como Trujillo, Barila, Rufo, Garrido, Leo, Juan Carlos, Javi Manzano, Pablo Box o Carpintero, continuaban un año más para pelear por el ascenso. Ya impuesto como objetivo inicial en la temporada 1999/00, a diferencia de su predecesora. Permanecían en el plantel los nombres anteriormente citados, al igual que aquella mágica dupla ofensiva formada por Alberto García y Keko. Algo así como la que quince años más tarde significaron Víctor Fernández y Toché, para que los más jóvenes se hagan una idea. Desafortunadamente, preludiando lo que ocurriera con la prolífica pareja de los gloriosos años en la LFP, los Alberto García y Keko adolecían de falta de repuesto en el banquillo.


Un año antes, en la campaña 1998/99, sí que se habían encontrado figuras de recambio para el inolvidable dúo de delanteros. Eran Iban Espadas y el mallorquín Manolo, y ambos, también, continuaron la temporada siguiente. Sin embargo, en el nuevo ejercicio liguero ofrecieron un nivel goleador muy por debajo del esperado y los técnicos tuvieron que


domingo, 30 de octubre de 2016

Descafeinado derbi

A todos nos ha pasado alguna vez que, cuando visionamos en el cine una de esas películas galardonadas con varios premios en el festival de no sé dónde o cuando comenzamos a seguir en televisión una serie que nos recomienda un conocido en el que confiamos, sentimos que, al final, la realidad no acaba saciando las expectativas creadas. Es habitual, a mayor interés personal concentrado en algo más fácil será que ese algo no esté a la altura y nos acabe decepcionando. Esto es lo que ocurrió ayer en Nueva Condomina, al menos para mí, y sobre todo en lo referente al primer tiempo. Un primer tiempo en el cual, salvo el conato de lesión de Sergio Jiménez, no sucedió absolutamente nada reseñable y en el que más de uno, intentando evitar caer en el bostezo, optó por entretenerse con las anécdotas de grada. 

Por suerte, todo cambió tras el descanso. Los jugadores albinegros implantaron un ritmo frenético al comenzar, generando ocasiones de gol de esas que no hubo noticia en la primera mitad, y partir de ahí el resto del encuentro sí fue más o menos lo esperado para un derbi de estas características. Remarco lo de más o menos. Emoción, alternativas para ambos conjuntos e incluso tuvimos una bronca final que concluía en minitangana. Faltó, quizá, polémica arbitral o alguna que otra expulsión, pero, no obstante, la segunda parte estuvo bastante bien en líneas generales. 

Tampoco hubo goles, es cierto, pero no hicieron falta para que los cartageneros volviéramos a casa satisfechos. Los murcianistas eran los que más tenían que perder, atendiendo a su situación institucional y deportiva. Y hasta puede que lo que me sepa


viernes, 28 de octubre de 2016

El Cartagena en Murcia

Hace días que algo especial está impregnado en el ambiente. Algo que provoca en los individuos una tensión psicológica similar a esa que surge horas antes de una Nochevieja o de cualquier otra fiesta que se planee desenfrenada. Es un cosquilleo interior que todos sentimos, pero por el que no debemos preocuparnos. Son los síntomas de que algo importante se aproxima. Es el derbi. Y es que, como no podía ser de otra manera, un Murcia vs Cartagena no es un partido más.

 Sin profundizar en los elementos de carácter sociológico, de sobra conocidos, que convierten la cita en un evento único, quisiera dejar patente mi desacuerdo con el manido mantra de “no se debe mezclar política y deporte”. Un lema que demagógicamente suele hacer acto de presencia en las previas de encuentros como este y que, en mi opinión, es bastante discutible. Pero no pretendo ir por ahí en estas líneas.

Carpintero celebrando su gol en 1999
Centrados en lo futbolístico, mal que nos pese a los cartageneros, cada vez que hemos tenido que afrontar una visita al Real Murcia CF se hizo observando al equipo grana desde una perspectiva inferior. Ellos asumían con naturalidad su rol de favoritos y nosotros, desde la resignación, encarnábamos el papel de víctimas. Como si de una reproducción del combate entre David y Goliat se tratase, pero sin un mísero tirachinas de juguete con el que intentar derrotar al gigante filisteo. Casi nunca tuvimos posibilidades, resultando históricamente los viajes albinegros a la capital toda una pesadilla deportiva.

Dicho lo cual, todo cambió con el nacimiento del actual FC Cartagena. No en lo referente a la trayectoria de los clubes, puesto que desde que se fundara la entidad en 1995 poca o ninguna sombra se les ha podido hacer a unos pimentoneros que han pasado incluso por


lunes, 24 de octubre de 2016

El gol de Juanlu Hens al Murcia

Líder llegaba el Murcia al Cartagonova, eso sí, pasando por un momento de vacas flacas viendo como su amplio colchón de puntos respecto al segundo clasificado -que encima era el UCAM- se iba desinflando. El Efesé por su parte llegaba en un estado de forma impecable, invicto desde la llegada de Monteagudo y con un objetivo menor, como era una plaza para jugar la Copa del Rey de la temporada siguiente. Con un año decepcionante y con la sensación de que ese grupo de jugadores podía haber dado más de lo que dio, nos llegó el derbi en el Cartagonova. Era el momento de demostrar que las dinámicas dan o quitan ventaja en un partido en el que al aficionado albinegro le importaba más ganarle al Murcia que esa plaza copera.

Juanlu celebrando el gol de la victoria
Había expectación en la ciudad, que tenía ganas de una gran cita futbolística en una temporada tan sombría como desgarradora. Ver al eterno rival líder toda la temporada por un lado y que los nuestros hubieran tirado las opciones de promoción de ascenso cuatro o cinco meses antes era realmente doloroso. Pero el destino nos tenía preparada una última prueba, la que nos podía permitir desquitarnos de esa sensación amarga vivida durante toda la campaña, con un derbi en la primera vuelta perdido en los últimos minutos incluido. Por una cosa o por otra el líder intratable no lo era tanto, había perdido semanas antes un encuentro ante el UCAM que de haber ganado le habría puesto en bandeja de plata el liderato, pero el fútbol siempre da una segunda oportunidad y hasta que no pita el árbitro o se acaba la temporada puede pasar absolutamente de todo.

Por su parte los periodistas murcianos que hablaban en enero de los líderes de otros grupos no lo hacían ya tan insolentemente, miraban más al segundo, que le pisaba los talones y que curiosamente era el otro equipo de la ciudad, al que empezaban a ver cómo una verdadera amenaza. Efectivamente, la soberbia de mirar a otros grupos como


jueves, 6 de octubre de 2016

Hace 20 años el efesé se fue a dormir

Hoy, 6 de octubre de 2016, se cumplen veinte años desde que el Cartagena FC se echara a dormir, deportivamente hablando en categoría senior, y dejase huérfanos a los seguidores de quien había representado al fútbol de la ciudad departamental durante más de medio siglo. Era la Jornada 6 del Grupo XIII de Tercera División y el efesé debía jugar ese día en Fortuna. No lo hizo. El equipo no se presentó en El Saladar y, advirtiendo el hecho de que si se repetía la infracción serían expulsados de la competición, el jueves de la semana siguiente se anunciaba oficialmente la renuncia a seguir compitiendo. De esta deprimente manera se ponía el punto, posteriormente supimos que y aparte, a la trayectoria del club que no hacía tanto disputaba sus encuentros en El Almarjal.

Era la temporada 1996/97, la segunda consecutiva en Tercera tras el descenso administrativo de 2ªB en agosto de 1995 y haber perdido la última oportunidad de resurrección en junio de 1996, con el estrepitoso 6-0 en Llíria en el play-off de ascenso a la categoría de bronce. Estaba Andrés Bolarín como Presidente y Perico Arango de entrenador. La liga comenzaba el 1 de septiembre, pero el peor de los finales posibles se intuía en el horizonte inmediato. Sin contar con la deuda total, cifrada en más de 700 millones de pesetas, en agosto Andrés Bolarín era arrestado por tráfico de estupefacientes y no saldría de prisión hasta casi el citado mes de octubre.

En lo estrictamente balompédico, aquel Cartagena FC estaba formado por jugadores mayormente de perfil bajo y/o canteranos. Además, el Club miraba de reojo a los emergentes proyectos del Cartagonova FC de Florentino Manzano y Cartagena Atlético de José Luis Belda; que, aunque no se dijera abiertamente, habían nacido para sustituirle. De las cinco primeras jornadas el efesé no consiguió ganar ninguna. Las estadísticas


miércoles, 21 de septiembre de 2016

Cuestión de humildad

En el deporte como en la vida, hay unos valores básicos que permiten convivir con el entorno, que no siempre van a asegurar el éxito pero sí se puede decir que sin ellos casi nunca se va a tocar la gloria. El que más me gusta es la humildad, porque en una sociedad en la que sólo se mira de frente a los vencedores y los vencidos son mirados de reojo con aires de superioridad y sarcasmo, es imprescindible tener muy claro que ser humilde te hará grande. Te hará grande cuando en la victoria consueles al derrotado y cuando en la derrota notes sinceridad en el consuelo del contrario, te hará grande tender la mano y levantar a un compañero o a un contrario, te hará grande cuando recibas un reconocimiento y pienses en lo que te ha costado llegar hasta ahí.

Limones en un lance del juego temporadas atrás
Realmente la humildad es una virtud, que en principio se tiene o no se tiene, pero que se puede trabajar y por supuesto se debe inculcar. Una virtud que nuestro club, el de las rayas blancas y negras, suele tener; algo que es motivo de orgullo para todos, ya que considero que la afición, en su mayoría humilde, sabe dónde estamos en todo momento, lo que puede dar su equipo y lo que se le pide. Pero el domingo, cuando La Roda metía el último gol del partido, algo olía mal, no se respiraba el aire puro de ambiente rural que se respiraba minutos antes, cuando el Cartagena pasaba como un avión por encima de su rival. ¿Qué había pasado? Habíamos perdido toda esa humildad que nos había llevado al triunfo.

Y no lo digo por la ola (que también), lo digo porque realmente se veía venir, el equipo dejó de competir, pero nosotros, los de la grada, nos dejamos llevar por un resultado tan abultado en tan poco tiempo que dejó asombrado a todos. Y si, luego llegó la ola, estéticamente bonita pero insultantemente guasona y despectiva. Habíamos ganado el partido, pero habíamos perdido el respeto al contrario y al final, como si de un golpe de justicia divina se tratara, nos cayeron dos goles. Este aire festivo celebrado con una ola humana de la que, por supuesto, fui partícipe hizo bajar la activación a unos jugadores


sábado, 17 de septiembre de 2016

Duelos fratricidas

El partido que tendrá lugar mañana en Ciudad Jardín, en el que medirán sus fuerzas el filial del FC Cartagena y el Cartagena FC, representa el enésimo duelo fratricida entre 'Cartagenas'. Una anomalía, repetida en el tiempo por estas tierras, en la que coexisten y compiten entre sí dos conjuntos que, en teoría, están llamados a monopolizar un mismo espacio balompédico. Lo habitual, salvo en grandes capitales, es encontrar un único club que abandere a toda la ciudad bajo su nombre y, paralelamente, se asienten a su alrededor lo que podríamos denominar como equipos de barriadas. Pero Cartagena es diferente. Al menos en fútbol, siempre lo es.

Ya con el ascenso del FCC en Alcoy, y la ruptura del acuerdo de filialidad con el efesé de Gómez Meseguer, los más jóvenes pudieron contemplar unos enfrentamientos similares al de mañana. Entonces, la entidad de Paco Gómez constituyó un filial dependiente que jugaba en La Unión y que se enfrentó al Cartagena FC en las temporadas 2009/10 y 2010/11, en Tercera División. El saldo de aquellos cuatro choques fue de tres victorias para el conjunto recién concebido y un empate. La primera de las contiendas tuvo un resultado de 1-1 en el Polígono Cabezo Beaza y era en el resto de choques cuando el equipo filial se mostraba superior a su adversario. En la campaña 2009/10, contando con jugadores de la talla de Arturo en la plantilla, ganaba por 2-1; mientras que en la 2010/11 se imponía por 1-0 en La Unión y 2-5 en la Ciudad Deportiva. Nombres como Dani RuizDani Gómez ejemplifican el potencial de aquel efímero proyecto que llegó a disputar play-off de ascenso a 2ªB.

Retrocediendo hasta enero de 1998, el Cartagonova FC (actual FC Cartagena) vencía 3-0 al Cartagena Atlético de José Luis Belda en el episodio final del pulso que aún mantenían por sustituir al Cartagena FC, tras su retirada de la competición el año anterior. Esa misma temporada 1997/98, Cartagonova y Cartagena Atlético también se habían visto las


lunes, 12 de septiembre de 2016

El poder de la exigencia

El aficionado al fútbol en Cartagena por regla general es una visceral mezcla de sentimientos que se contraponen cada semana que juega su equipo, el de las rayas blancas y negras. Con un espíritu casi paternal advierte, corrige, reprende y se cabrea tomando un sentido con el que aleccionar de esa manera a los suyos, como un padre que quiere lo mejor para su hijo. Por ello no seríamos justos si juzgáramos a un aficionado que desde la buena fe, lleva a cabo una crítica constructiva a la par que dura aunque en ocasiones nos parezca desmesurado desde fuera, como ese padre que quiere sacar lo mejor de su hijo, pero que no acaba de dar con la tecla.

Afición albinegra en el Murcia 1-4 Cartagena
La sensación que me da es que se tienen muchas ganas de volver a hacer algo grande. El Efesé, hace apenas dos años estuvo herido de muerte, desangrándose en un hospital en el que hasta los médicos estaban redactando el acta de defunción y la temporada siguiente se fue recuperando poco a poco con una complacencia impropia por parte de su afición la cual le perdonaba cada tropiezo seguramente siendo condescendiente por la situación vivida anteriormente. El aficionado puede llegar a sentir un punto de culpa por haber sido demasiado permisivo en el pasado curso y por ello no quiere que este año le pille el toro y exige, pero sin término medio. Exige hasta el punto de no dejarle crédito ni después de una racha de 3 partidos seguidos ganados, ni de comprender que hace escasos cuatro días recibió tras más de dos horas de juego el primer varapalo con la eliminación copera. La exigencia es imprescindible a la hora de conseguir un buen rendimiento, pero el exceso de presión al igual que la permisividad del pasado año va a ser contraproducente siempre.

Desde mi punto de vista, se equivoca primero Monteagudo cuando prepara el terreno para lo que iba a ser la primera derrota de la temporada. Quizá el técnico lo veía venir


lunes, 5 de septiembre de 2016

Cartagena vs Hércules, el otro derbi

Si preguntásemos por las calles de nuestra trimilenaria ciudad, a un individuo cualquiera, contra qué equipo se vive mayor rivalidad balompédica en Cartagena la respuesta sería unánime, incluyendo la obtenida de aquellos que se declarasen no aficionados al fútbol. El Real Murcia, sin discusión. Pero ¿y si preguntáramos por el segundo club sobre el que más apetencia de victoria existe desde la perspectiva albinegra? La contestación a buen seguro no coincidiría en porcentaje con la referente al cuadro grana, aunque sí se situaría cerca de su resultado. Y es que el susodicho en cuestión no sería otro vecino de la Región, sino que se trataría del Hércules de Alicante. Próximo rival del Cartagena en Copa del Rey, tras haber goleado al Andorra de Teruel por 0-5.

Raimondi, dialogando en la última visita herculana
Desde los primitivos enfrentamientos Cartagena vs Hércules, que se remontan a aquellos campeonatos regionales de los años 20s que daban acceso al Campeonato de España, los blanquiazules han sido unos habituales visitantes de tierras cartagenereas prácticamente cada década. A pesar de haber estado en numerosas ocasiones en superior categoría a los albinegros o de haber sido encuadrados en grupos distintos de la misma división. Circunstancia que se da, por ejemplo, este año en 2ªB.

Cuantitativamente, se enumeran en veinticinco las temporadas habiendo coincidido en liga. Más un buen puñado de participaciones conjuntas en la antes mencionada categoría regional, las promociones de ascenso e, incluso, una eliminatoria de Copa de la Liga en


lunes, 1 de agosto de 2016

El peso de la historia

Bastantes fueron las voces que el año pasado por estas fechas -cierto es que tras un mes de junio, digamos, convulso- manifestaban que la temporada 2015/16 para el FC Cartagena debía ser de transición. Una campaña en la que el Club basase su metamorfosis, de la tenebrosidad anterior, hacia el prometedor ciclo que aparentemente se avecina.

Dicha ilusionante concepción se tradujo en una condescendiente exigencia deportiva para el equipo que, por entonces, dirigía Víctor Fernández. Expresiones del tipo con no sufrir es suficiente o vale quedar en mitad de la tabla inundaban el llamado entorno y se convirtieron en recurrencias habituales para prensa y aficionados. Conste que servidor también compartía aquella mirada benevolente a una plantilla reconstruida casi desde cero y a una entidad estructuralmente bajo mínimos, pero no hasta ese punto.

Atlas, sosteniendo el mundo
Así pasó luego. Con tanta tranquilidad mal entendida en el ambiente, sin darle mayor importancia a los resultados, solo se cosechó una victoria en los seis primeros partidos de liga. Y un poco más adelante el equipo ya veía el play-off de ascenso a catorce puntos de distancia. Habíamos dicho adiós al cuarto puesto prácticamente a mitad de temporada. Para más inri, con el eterno rival casi doblándonos la puntuación. Una situación exasperante para cualquiera que se precie de ser seguidor albinegro.

¿Que por qué digo esto? Porque la historia la tengo en cuenta. Está claro que una camiseta, por el mero hecho de lucir unos determinados colores o un particular escudo, no gana partidos sola. Evidentemente. Pero el peso de la historia cuenta, siempre cuenta. Ha de respetarse, y me explico.

El FC Cartagena cumplió el pasado 27 de julio los veintiún años de edad. No es tan joven. Y, de esos veintiún años, quince han sido en la categoría de bronce del fútbol español. Se ha convertido, por derecho propio, en uno de los clásicos de 2ªB en este Siglo XXI y se


viernes, 15 de julio de 2016

Carta de Carlos Vaso sobre la fundación del Cartagena Foot-ball Club en 1919

Publicamos la carta escrita por Carlos Vaso, hijo de uno de los fundadores del efesé primigenio y exjugador albinegro durante las décadas de los años 20s y 30s junto a sus hermanos (Jesús, Pepe y Luis), en la que relata sus recuerdos del primer Cartagena FC (Cartagena Foot-ball Club en 1919 y renombrado a Cartagena Club de Fútbol en 1941 hasta su desaparición en 1952).

En ella se puede apreciar su desencanto por el trato recibido de las sucesivas directivas del primer club de la ciudad, habiendo pertenecido a una de las familias más vinculadas al fútbol cartagenero casi desde que comenzara a practicarse por estos lares, a principios del Siglo XX. La nula capacidad de reconocer y cuidar la historia de nuestro balompié, una dolencia que sigue vigente en el efesé pero que no es, por lo que leemos, de reciente origen.


Para los pocos instruidos en dicha materia, cabe mencionar que Carlos Vaso fue hijo de José García Vaso. Una de las figuras más importantes de Cartagena a finales del Siglo XIX, y principios del siguiente, en sus distintas labores de abogado, periodista y político. Siendo Alcalde del Municipio durante los años 1916 y 1917, además de Diputado en las Cortes Generales en varias legislaturas. Como propietario del periódico "La Tierra" tuvo un papel clave en la promoción del recién nacido Cartagena Foot-ball Club. 

Agradecemos desde aquí al hijo de Carlos Vaso, el -también cartagenero- productor y músico Carlos García-Vaso, por permitirnos acceder a este documento de gran valor histórico para el fútbol de nuestra ciudad. Las tres primeras imágenes son la carta manuscrita / mecanografiada en sí, y después sigue la transcripción realizada por su propio hijo para facilitar su lectura.


jueves, 23 de junio de 2016

‘El autogol de Pombo’ cumple sus Bodas de Plata

Fecha: 23 de junio de 1991. Lugar: estadio Las Margaritas de Getafe. Hechos: A falta de escasos segundos para la conclusión del partido, que enfrentaba a Getafe CF y Racing de Santander, el defensa madrileño Luis Pombo materializaba lo único que podía impedir la celebración cartagenera. Batir a su propio portero. El Cartagena FC, una vez más, se quedaba con la miel en los labios y sin el ascenso a Segunda División.

Era la temporada 1990/91, la primera de José Luis Belda como Presidente del efesé, y la plantilla albinegra estaba compuesta en un 70% por jugadores de la tierra; entre los que destacaban Paco Sánchez, Pedro Cordero, Sebas, Palomeque, Rai, Alfonso, Ángel o Manolo Requena. Junto a los foráneos Raudona, Queco o Trigueros y la guinda de los delanteros Naixes y Boria, ambos venidos de superior categoría una vez iniciada la competición, se completaba el plantel. El director de orquesta para aquellos jugadores comenzaría siendo Francisco Parreño, que continuaba de la anterior campaña.

Diario MARCA
Aquel año, el presupuesto total del Club rondaba los 130 millones de pesetas y el objetivo no podía ser otro que lograr el ascenso al fútbol profesional.

Encuadrados en el Grupo IV de 2ªB -por entonces destinado a la zona levantina, en vez de a la andaluza- a los albinegros les iba a tocar medir sus fuerzas con los Barcelona ‘B’, Alcoyano, Hércules, Sant Andreu, Manlleu, Gandía o Benidorm. Rivales muy fuertes en la época.

El inicio liguero del equipo fue malo y la primera victoria no llegaría hasta la Jornada 6, en la que se ganó 0-1 al Torrent con gol de Naixes. Posteriormente el rumbo se enderezaría, lo que unido a la trayectoria en Copa del Rey -donde se llegó a 3ª Ronda ante el Real Valladolid de Primera División- extendieron la confianza depositada en el técnico cordobés.

Pero todo cambiaría finalizando la primera vuelta. El Cartagena viajaba a Mallorca para enfrentarse al filial bermellón y salía goleado 3-0, en un polémico partido con cuatro expulsiones albinegras. Parreño dimitía tras dicho encuentro y la Directiva contrataba en


sábado, 11 de junio de 2016

Una década del ‘vecindariazo’

Diez años ya, toda una década, ha pasado desde que la UD Vecindario decidiese grabar su nombre en la historia del fútbol de Cartagena. Para nuestra desgracia. Aquella desdichada fecha -11 de junio de 2006- además nos suponía la segunda gran decepción a toda una generación de aficionados en la ciudad. La primera había sido el ‘cordobazo’ en 1999.

Sabino, al finalizar el encuentro
Pongámonos en contexto. El FC Cartagena iniciaba la temporada 2005/06 -el tercer proyecto de la época Paco Gómez- después de que los dos predecesores no hubiesen funcionado nada bien. Lejos del play-off a Segunda División e inmerso en la lucha por eludir el descenso, en ambos casos. Para las diez últimas jornadas de la campaña 2004/05 había aterrizado en el banquillo un, por entonces, desconocido Juan Ignacio Martínez. Que cumplía su cometido y se ganaba el beneplácito de continuar un año más.

En aquel nuevo intento de la entidad por pelear el ascenso, JIM y Torrecilla -actual Director Deportivo del Betis- conformaron una plantilla con jugadores de superior categoría, como Cabrejo, Molist o Sabino, y unos jóvenes precoces del nivel de Natalio o Ander Lafuente. A ellos se les unieron un centrocampista y un lateral derecho con los


jueves, 2 de junio de 2016

Llega el mes de junio y... ¿qué ocurriría en Cartagena si tuviésemos un UCAM en Segunda?

El ascenso a la Segunda División del UCAM Murcia casi se ha solapado en el tiempo con la llegada del mes de junio. Un mes correspondiente con la llegada del verano y, en muchos casos, momento de hacer balance. También, para muchos, como así ocurrió hace un año, puede ser un mes propicio para demostrar su escasa fidelidad a un club de fútbol.

¿Y si... ?
Al otro lado del Puerto de la Cadena, si no ocurre nada en cuanto a problemas financieros que se traduzcan en problemas deportivos, tendrán el año que viene al histórico Real Murcia en Segunda División 'B' y al novel UCAM Murcia en el fútbol profesional... compitiendo, salvo sorpresa mayúscula, en el viejo estadio de la Condomina, el lugar en el que el club grana forjó sus éxitos más importantes.

La pregunta es si la afición de la ciudad del Segura, con la llegada del mes de junio, seguirá apoyando en masa a un club casi centenario, con una historia importante en la Segunda División y un historial aceptable en la Primera División, si atendemos al número de temporadas o, si por el contrario, apostará por un


sábado, 21 de mayo de 2016

El día que el Efesé ganó por el número de córners

Algo ha llovido desde entonces. De hecho, en unos pocos días, se cumplirán sus Bodas de Oro. La primavera de 1966 casi tocaba a su fin y un hito rocambolesco del fútbol de entonces, puesto que hoy día es impensable, afectaría al Efesé quedando plasmado para siempre en la historia del balompié albinegro. En la disputa del primer cruce de la promoción de ascenso a Segunda División -desde Tercera, aún no existía la 2ªB- el CD Cartagena (actual Cartagena FC) vencía la eliminatoria ante la Cultural Leonesa gracias a los saques de esquina. Tal cual suena.

Después de competir de manera alterna durante siete temporadas en la categoría de plata y de vivir el primer resurgimiento del fútbol local -bajo la denominación de UD Cartagenera- el Efesé enfocaba la década de los 60s con la única meta de regresar cuanto antes a Segunda División. Objetivo que se lograba en 1961 ante el Sestao, en un play-off con vuelta disputada en el viejo estadio de San Mamés, en Bilbao. Dos temporadas anduvieron los albinegros, ya bajo la denominación de CD Cartagena, en dicha división. Descendiendo en el ejercicio 62/63, tras caer en la promoción ante el Badalona.


Con el retorno al Grupo X de Tercera División, el Efesé encadenaba tres temporadas seguidas siendo subcampeón de liga. Por detrás del Albacete, en las dos primeras campañas, y del Eldense, en la última a la que nos referimos. Aunque en ninguna de ellas


domingo, 15 de mayo de 2016

El Icue y… cuando los mayos se largan con copa


“La verdadera salida está precisamente donde no hay salida alguna para el juicio humano”. (León Chestov)

El Icue, este año sí, desea disfrutar la alegría de un mayo con copa. Hoy ha concluido con éste FC Cartagena 1 – San Roque de Lepe 1 una desgraciada temporada, tardes y tardes apáticas sin futbol, una temporada abúlicamente desgraciada en algunos partidos en la que no hemos podido celebrar nada. Hoy acaba de cerrarse. ¡Por favor que se largue ya!, porque todo, absolutamente todo, lo hemos sentido como ese gris que no es otra cosa que el fundido del blanco y del negro de nuestros colores. Ha sido como un querer y no saber cómo mostrárnoslo. Quisiste, querido Icue, que todo hubiese vuelto a empezar cuando se acercó hasta la orilla de La Rambla ese Monte-agudo y hasta te ilusionaste, pero tuviste que esperar, encerrado como un perro rabioso. Así se siente mi Icue y nuestro FC Cartagena después de todo lo de hoy y así debe de sentirse la efesemanía y toda su corte celestial. 

He sentido esta tarde tanta desilusión, tanto desánimo, aunque se haya conseguido el objetivo, dejando pelos en la gatera, que ni me esfuerzo en pretender que la Liga de la próxima temporada nos haga ilusión. Puede que la próxima temporada nos situemos en


sábado, 14 de mayo de 2016

El Icue y… cuando Seba Ribas se quitó la máscara


Recuerda el Icue que todos, absolutamente todos, estábamos afanosamente preocupados en los preparativos, por aquellas fechas de los Idus de Marzo, de las galas del difunto. Nadie de la efesemanía quería que nuestro FC Cartagena se muriese, todos esperábamos que esto no iba a suceder, teníamos fe, esa fe del carbonero que se refugiaba a la sombra del milagro. Sí, había fe y esperanza, pero también esperpento y ahí estábamos refugiándonos en Valle Inclán para seguir sus instrucciones en “Las galas del Difunto”. En este FC Cartagena todo era movimiento, todo era mala movida, todo estaba en el ojo del huracán, el enfermo había entrado en trance de gravedad extrema, después de unas semanas con pronóstico reservado. La Institución se desmoronaba entre las lágrimas de unos y las chanzas de otros para afrontar la conjugación de esos dos verbos que atormentaban a todos: Permanecer y salvar; permanencia y salvación. Auténticas palabras impregnadas de turbulencias.

Y en esas se estaba cuando apareció Chus Hevia para insuflar un pequeño hilillo de vida con ese su raquítico gol de victoria en los estertores del partido que sirvió para ganar el partido y salir de los puestos de descenso. Y Palomeque, también, asomó la


miércoles, 11 de mayo de 2016

Sobre la afición del Fútbol Club Cartagena

Decía Winston Churchill que las críticas no son agradables, pero sí son necesarias. En cuanto al Fútbol Club Cartagena, toca establecer un juicio sobre su afición. Es cierto que ha habido una evolución en cuanto al número de abonados que acuden a las oficinas del estadio a retirar su abono cada verano. Esto es consecuencia del buen desempeño deportivo, salvo en la última temporada, realizado por el club en sus tres campañas en el fútbol profesional.

Antes del ascenso de Alcoy, la masa social del club estaba muy tocada. Más de dos décadas sin alcanzar el fútbol profesional, con fracasos estrepitosos en partidos decisivos mediante, unido al cambio de club representativo, hicieron que la llama se fuese apagando. Por tanto, se puede entender el descontento del aficionado tras tantos sinsabores. 

El problema de la masa social del Fútbol Club Cartagena no se mide en términos cuantitativos, o no tanto, sino que se mide a nivel cualitativo. Me explico. El efesé cuenta o ha contado, en momentos puntuales, como ahora, con una cantidad de abonados que le situarían, en ese apartado, en superior categoría. A este respecto no hay nada que achacar.

El problema viene cuando nos preguntamos, ¿ocurre esto siempre? o ¿al menos hay una base sólida y más o menos numerosa que, ante "barrancos" en la trayectoria del club,


domingo, 8 de mayo de 2016

Quique de Lucas, un gentleman del fútbol y de la vida


“No hay mérito mayor que aprovechar la oportunidad en todas las cosas”. (Píndaro)

Este trotamundos del fútbol, -Hospitalet de Llobregat, Barcelona, 17 de agosto de 1978- jugó en las categorías inferiores del Espanyol, debutando con el primer equipo en 1998 y con el que, 2000-01, ganó la Copa del Rey, para después jugar en el PSG (2001), Chelsea (2002-2003), Deportivo Alavés (2003-2007), Real Murcia CF (2007-2009), FC Cartagena (2009-2010), Celta de Vigo, (2010-2013) y Hércules CF, (2013-2014). En 2014 cuelga las botas tras una temporada en el Hércules. Su comportamiento e inteligencia futbolística tuvo el mérito suficiente como para ser convocado a la internacionalidad con la selección española en las categorías sub-15, sub-16, sub-18 y sub-21.

Este futbolista era de aquellos que lo que pensaban, te lo soltaban a la cara como si nada del mundo: “Si estamos como en octubre, subimos con la gorra”. Son palabras que manifestó mostrando su lado más optimista y asegurando: “Si hay algo positivo en estos


viernes, 6 de mayo de 2016

El Icue y… cuando ya no es posible parar el rugido de la marabunta


Palomeque dixit y lo dijo, rompiendo toda su templanza, embarazado por la derrota, por el enfado y por cómo se había producido el desastre que más bien parecía producto de aquel desembarco de Alhucemas en la historiada guerra del Rif. Lo dijo contundentemente, Abenza estaba en el punto de mira, y fue cuando el partido ya había terminado y sin abandonar el estadio Álvarez Claro: “Al jugador que no esté para competir lo voy a echar yo. Hoy nos jugábamos mucho, como para hacer ciertas cosas en un equipo que se juega la vida. Al final se te queda cara de tonto”.

Que después de esta derrota el jaque se mostró era evidente, existía y nos había enseñado su patita y sólo faltaba adornarlo con un verbo; el verbo matar para que al FC Cartagena le diesen esa jugada maestra y ultima del ajedrez que no es otra que el jaque mate. Todo era alarmante, todos clamábamos al cielo, todo estaba a punto de desplomarse, fundamentalmente después de las tres derrotas conseguidas antes de acercarse hasta la Ciudad de Melilla. Aquella tarde el Chiringuito de Sporto Gol Man llegaron a pintarlo de rojo, de luz roja total. Es lo que había. 

Y los títulos previos, para que la efesemanía no sufriese, aparecieron de esta guisa: “Una hazaña para huir del descenso”. “El Cartagena, que nunca ha ganado en


lunes, 2 de mayo de 2016

La estabilidad... esa cualidad necesaria que tanta falta hace en el Fútbol Club Cartagena

Llegamos al ocaso de la temporada 2015/2016, pues sólo faltan dos jornadas para la conclusión del campeonato. A lo largo del mismo, el club ha alcanzado cierta estabilidad institucional muy necesaria para la consecución de determinados objetivos. Es fruto de dicha estabilidad institucional y, de la mano de una gestión rigurosa y calmada, en contraposición con los vaivenes a los que estamos acostumbrados en Cartagena, como se alcanzan los objetivos deportivos.

La unión de ambas fortalezas debe conducir a la estabilidad deportiva, tan necesaria como ausente, salvo excepciones, en la historia del fútbol cartagenero. No hace falta remontarse muchos años para recordar hechos que explican la carencia de éxitos deportivos continuados en el tiempo. Los ejemplos son numerosos en los últimos años. 
Fútbol Club Cartagena

Cuando hemos contado con dirigentes cuya solvencia económica era más o menos importante, siquiera se ha cumplido con las obligaciones más elementales del día a día de un club de fútbol. Tampoco hemos contado con la calma institucional y el "laissez faire, laissez passer" necesario para alcanzar los objetivos deportivos. Respecto a lo primero, dos han sido, por norma general, los principales problemas:
  • Nula capacidad de la administración del club para gestionar un club de fútbol 
  • Incapacidad para delegar en profesionales del deporte
Cuando por guiños del destino, el club ha contado con un profesional de la dirección deportiva y se han alcanzado objetivos importantes, incluso teniendo la posibilidad,


domingo, 1 de mayo de 2016

El Icue… cuando el estadio lució un fútbol primoroso en tarde primaveral


Cada día que conozco más Cartagena, más me enamoro de ella. (Pedro Antonio Sánchez López, Presidente de la Región de Murcia)

Era la previa al partido, la tarde se presentaba espléndida, el ambiente, eso, ambiental, la entrada a reventar y la alineación de los dos equipos casi las de siempre durante esta temporada. Y el resultado, ya lo conocen: FC Cartagena 2 – Real Murcia 1. Y otra cosa, afortunadamente, este no ha sido un partido de segunda B como lo certifica la asistencia de10327 espectadores Y para que nada faltase también se asomó el Lebeche, él quiso estar presente en el espectáculo comunitario para presenciar cómo Chus Hevia sacaba el arco y las flechas para marcar el 1-0 a pase con tiralíneas de Juan Carlos Menudo, otra vez y de nuevo apareció el “Nano”. Y vino el penalti, que no lo fue, cobrado por el hermano menor del árbitro de Primera División y, por lo tanto, con los mismos apellidos de Iglesias Villanueva que sirvió para que el Real Murcia marcase por mediación de Chavero. Sólo tres minutos le duró la alegría al FC Cartagena. Y el fútbol apareció y los futbolistas de ambos equipos se vinieron arriba. Y el FC Cartagena pareció arrugarse en el segundo tiempo, mientras el Murcia salió a tumba abierta, entregado en la confección de un buen fútbol. Y el Efesé se sobrepuso, se ordenó y hasta logró imponerse a los de la capital y marcó Chus Hevia y su gol no subió al marcador. Y, mientras y dentro de su euforia, el señor de la megafonía anunciaba y cantaba el gol


miércoles, 27 de abril de 2016

Filosofando sobre el derbi regional y... acerca de algo más

El próximo sábado asistiremos a la celebración de un nuevo envite entre los equipos más representativos de las dos ciudades más importantes de la Región. Un enfrentamiento deportivo que, si bien no estará impregnado por la grandeza de tiempos mejores, siempre tiene alicientes extra garantizados. 

Acaso añoremos dicha grandeza de otros tiempos, aquéllos en los que luchamos por tocar la gloria de la Primera División y nos presentamos firmes y con argumentos superiores en este tipo de partidos, tal vez la caída de ambos clubes a la Segunda División B sea un mal necesario para volver, ojalá más pronto que tarde, a luchar por objetivos más ambiciosos.

Por supuesto que a cualquier aficionado le gustaría disfrutar de este partido de rivalidad a la vez que saborear la melaza del fútbol profesional pero a mí, personalmente, me gusta ver un poco más allá de todo ello. Claro que es importante comparecer en este tipo de partidos luchando por cotas más altas o compitiendo por objetivos mucho más jugosos, pero quizá, como decía, estar hoy donde estamos sea fruto de años de malas decisiones, tanto deportivas como de gestión, ambas estrechamente ligadas en un club de fútbol, como no podía ser de otra forma.

Fútbol Club Cartagena 3 Real Murcia 2; 11/04/2010
Pero igual que la euforia desmedida de aquéllos días escondía un modelo de gestión que podría caer como un castillo de naipes frente a la más mínima contingencia, hoy nos encontramos ante un derbi en un momento en el cual tenemos la posibilidad de construir otro modelo, mucho más sostenible a largo plazo. Sí, este tipo de partidos, lo que les envuelve, son ideales para analizar, para observar, en qué lugar estamos.

Por tanto, ante el duelo frente al Real Murcia, preguntémonos en qué posición está nuestra afición, analicemos qué fortalezas y debilidades tiene nuestro club y valoremos


domingo, 24 de abril de 2016

VIEJAS TENSIONES


No hay mérito mayor que aprovechar la oportunidad en todas las cosas”. (Píndaro)

No sé si el partido de esta tarde ha sido un derbi, de esos de recuerdo, de pelea, de golpes, de enfrentamientos y hasta de empate en el resultado. Quizá no, excepto en el resultado. Recuerdo algún que otro derbi de los que se peleaban en el desaparecido Armajal y que muchos, al no saber recordar otras cosas, lo hacen cansinamente. Eran derbis en los que la fanfarria anunciadora duraba toda una semana y, según quien lo ganara, se agregaba otra más y, en los casos especialísimos, hasta otra más. Hoy no. Ya no hay fanfarria y, si la hay, ésta se ha diluido en un instante, en ese pronto en el que la afición se ocupaba de aparcar en las cercanías del estadio y, a lo sumo, hasta que se ha apagado el plan que el equipo contrario tenía para zurrarle al otro el primer sopapo en la boca. Hoy no ha habido tensión ni fanfarria ni pegada ni nada. Si hubo unos golillos sueltos por cada bando. Se ha visto esta tarde, comenzó el partido cero a cero y terminó empatando a un gol por equipo. 

Al FC Cartagena esta tarde no han podido sacudirle con fuerza de brócoli, aunque al principio si dio la sensación iban a hacerlo en todo lo alto del paladar y hasta pareció que el Icue, delante de la pantalla de su televisor, sentía el golpe. Sí, sí, nos han pegado en la boca al no ser éste un derbi de aquellos derbis que inspiraban condescendencia y


El Icue y… qué quieren que les cuente

A MENOS DE TRES HORAS DEL PARTIDO DE ESTA TARDE AQUÍ TIENEN LO DE LA TEMPORADA PASADA


El FC Cartagena era un equipo sin rumbo, un equipo sin entrenador, un equipo sin directiva y un equipo sin nada, descompuesto, desdibujado e inoperante, sin ilusión, mediocre y a remolque de los acontecimientos que él mismo y desde su seno se producían. Eso sí: un equipo con muchas, demasiadas noticias extradeportivas Y en estas circunstancias y con esta vestimenta descolorida de sus esenciales colores se acercó hasta el Artés Carrasco para ofrecerse, cual sacrificio y que La Hoya Lorca sin hacer nada del otro mundo le pasase por encima, se convirtiese en un haraposo equipo y lo arrojase hasta la zona de descenso a la Tercera División.  Este Efesé fue desnudado por las dulces manos y pies de un equipo, el de Campo, que cada vez que rondaba la portería la portería de Limones hostigaba y destrozaba a los pupilos del ausente y vacacional Ribas, huido a Uruguay a por el visado de residencia. ¡Qué cosas, Dios mío, qué cosas!
Los de siempre, los de la botella medio vacía o medio llena, los de todavía hay tiempo y se puede reaccionar, los de las mamandurrias, llegaron a titular como siempre: “Un derbi para despertar o sufrir”. Solamente les restó añadir morir o dormir. Pero nada, ellos a sus cosas, escribir que, “en este inicio de temporada La


sábado, 23 de abril de 2016

Pido la paz y la palabra


Tengo que empezar como los malos oradores: pidiendo perdón. Este artículo debiera escribirse lentamente, calculando cada palabra, poniendo en cada línea siquiera cinco minutos de labor. Lo requiere el asunto; lo requiero yo mismo. He pensado en este artículo durante largo tiempo, desde que Ricardo me invitase a participar en este su blog EfeséHistoria. Y es que en este día que escribo es nada más y nada menos que el cuatricentenario de don Miguel de Cervantes y Saavedra. Me llamaron y respondí. Solicitaron de mi pluma y aquí estoy para escribir en defensa del reino del balón y su justicia, también de los futbolistas cuando estos lo merezcan y de sus dirigentes, ¡ay sus dirigentes!, que, en algunas ocasiones, son más cabecillas y no tanto conductores. He acudido porque al mirar la cabecera del blog que me solicita colaboración, he comprobado que ésta recoge dos de los escudos que más me impactaron desde que era niño y correteaba, como cualquier Icue, por debajo y por encima de la Muralla del Mar que es donde viví y aprendí a querer estos colores. Y aquí estoy junto al poeta Blas de Otero para: “Pedir la paz y la palabra. He dicho “silencio”, “sombra”, “vacío” etcétera. Digo “del hombre y su justicia”, “océano pacífico”, lo que me dejan. Pido la paz y la palabra”. 

Y aquí estoy, no necesito presentarme, todos, bueno casi todos, los efesemaníacos me conocen desde que el FC Cartagena se instaló en aquella gloriosa 2ª División de los